FÚTBOL INFANTIL : SESIÓN EXTRAORDINARIA, SUSPENSIONES Y POSIBLES DENUNCIAS.

El fútbol infantil de Río Branco vive momentos controvertidos en los últimos días.

Se sabe que existieron dos suspensiones que tienen relación con actitudes que incitan a la violencia ya sea de padres o de entrenadores. Es así que, tras denuncia en formulario de un árbitro, ante intentos de agresión entre un padre y un técnico de uno de los clubes; luego de la actuación del tribunal de penas de la Liga Río Branco de fútbol infantil, se resolvió suspender por un año, tanto al padre involucrado como al técnico; donde no podrán ingresar ambos al recinto del estadio municipal durante ese período, entre otras restricciones.

Asimismo, no se descarta la actuación en las próximas horas de la Liga, como consecuencia de una situación a nivel judicial que involucra a uno de sus integrantes; no teniendo relación con ninguna actividad dentro del fútbol infantil.

A su vez, esta noche en sesión extraordinaria se tratará el tema de un faltante de dinero en tesorería de una de las selecciones de la Liga.

Es necesario hacer un par de puntualizaciones al respecto. Hay que entender y actuar en consecuencia en el hecho de que nada que sea extradeportivo puede molestar o desviar la atención de un niño que hace parte del fútbol infantil, que no sea más que la actividad que desarrolla jugando al fútbol, divirtiéndose y disfrutando sanamente como lo hacen, despojados totalmente de algo que involucre a los mayores y más dentro de un recinto deportivo. Por lo tanto, las divergencias que puedan existir ya sean entre espectadores o dirigentes y técnicos tienen que resolverse en los ámbitos que correspondan y no en una cancha de fútbol infantil.

Desconocemos si hay intereses mayores ya sea de clubes o la liga como tal, que no sean más que el hecho de brindarles a los niños de competir deportivamente, pero con el objetivo final del fútbol infantil que no debe ser otro que brindarle la posibilidad de jugar al niño que juega bien al deporte, pero también al que no tiene las mismas condiciones naturales de hacerlo. También que quienes vayan a asistir a las canchas del fútbol infantil no levanten la voz más que para alentar al niño. No tengan dudas que se lo agradecerán y estarán satisfechos de hacer lo que les gusta que es jugar y reír cuando ganan y porque no llorar cuando pierden porque hace parte del deporte. Pero nada debe interferir en esa posibilidad de disfrutar y compartir momentos entre compañeros y rivales nada más que por el juego mismo.

por: Alejandro Sosa